Decir GRACIAS es poco por TANTO. No lo podrían entender en otras partes del mundo porque ARGENTINA es un país distinto, resiste tanto, siente tanto, y la mayoría de las veces, el esfuerzo no da recompensa.
Gracias a Dios, algunas veces si. Será por eso que vale la pena vivir aquí dándole siempre pa´ adelante?
SOMOS así, es nuestra naturaleza y ningún sacrificio o cábala fue imposible para nosotros.
La euforia fue proporcional y en sentido inverso a la angustia que sufrimos en tiempos de encierro por la cuarentena.
Esta selección de fútbol nos devolvió la alegría y por eso la gratitud es infinita.
La Esperanza renace porque en ellos vemos que persisten la grandeza y los valores.
Elegimos creer y se pudo cumplir un sueño. Y si este tremendo movimiento de energía hizo inclinar el eje de la tierra en positivo para Argentina definitivamente? Why not? Otra vez, elijo creer.
Y a los políticos que prometen y no cumplen, los argentinos les decimos: “Andá (O mejor dicho vayan) pa´allá BOBO/s”.
